El rol de los padres en la orientación vocacional

Definitivamente, la elección de una carrera es una decisión muy difícil. Los adultos tienen la compleja tarea de acompañar a los adolescentes en este proceso de reflexión sobre la propia historia, posibilitando el descubrimiento de intereses e inclinaciones, facilitando la percepción realista de las posibilidades personales de afrontar determinadas exigencias, ayudándoles a buscar e interpretar información sobre la amplísima gama de oportunidades de elección que ofrece el mundo de la educación superior.

En el transcurso del proceso de orientacioón vocacional surgen a menudo interrogantes y dudas sobre el rol que como adultos debemos cumplir, sobre los límites de nuestra intervención para acompañar sin invadir, para aconsejar sin imponer, para estimular sin exigir, para tomar distancia sin desinteresarse.

Los adultos se preguntan:

¿Sirven los test?

¿Es necesario que mi hijo haga orientación vocacional si ya tiene elegida la carrera desde que era chico?

¿Intervengo en las decisiones o me quedo afuera?

Creo que mi hijo se está equivocando, ¿qué hago?

Mi hijo cambia todos los días de idea, ¿es normal?

A mi hijo le gusta una carrera corta, ¿no es mejor que vaya a la universidad?

Mi hijo quiere averiguar todo por su cuenta, ¿no es mejor que lo acompañe un adulto?

Está en segundo año y no le gusta lo que eligió, ¿tenemos que obligarlo a que siga?

Quiere estudiar abogacía desde que era chico y ahora quiere hacer publicidad, ¿está bien que cambie de idea?

Mi hijo eligió una carera a la que va a ir con sus amigos, ¿es una ventaja?

¿Qué institución conviene más? ¿Privada o publica? ¿Terciaria o universitaria?

En este blog los adultos encontarán consejos y recomendaciones para acompañar a sus hijos en el proceso de orientación vocacional. También responderemos a sus dudas e inquietudes para ayudarlos a transitar con sus hijos este complejo pero maravilloso proceso.